En cualquier relación, sea amorosa, familiar o de amistad, queremos sentirnos cómodos, queridos y apreciados. A pesar de ello es natural que en todo tipo de relación existan conflictos o diferencias. Sin embargo, hay que tener mucho cuidado de saber distinguir pequeños desacuerdos con manifestaciones de violencia.
Muchas veces pensamos en la violencia como un tipo de agresión directa de manera física o verbal, pero la violencia también está presente de maneras mucho más sutiles y difíciles de identificar, como bromas aparentemente inocentes o chantajes aparentemente inofensivos.
Es importante poder identificar estas situaciones de violencia a tiempo antes de que crezcan y sea más difícil detenerlas, o existan consecuencias negativas. Por eso, el Instituto Politécnico Nacional creó el violentómetro como una escala de diversas manifestaciones de violencia.
Estas actitudes pueden parecer no muy graves o incluso inocentes. Sin embargo, pueden llegar a causar daño a la otra persona, violar su derecho a un trato justo y digno, y abrir la puerta a conductas mas violentas.
Bromas hirientes Chantaje Mentiras o engaños Ignorar de forma intencional, “aplicar la ley de hielo” Celar Culpabilizar por errores que no cometieron Descalificar su opinión o sentimientos Ridiculizar u ofender
Si te ves en cualquiera de estas situaciones, comunica al agresor tu disconformidad e intenta alejarte si ves que la violencia no disminuye.
Este tipo de actitudes exponen conductas que atentan contra los derechos humanos de la otra persona, y de ser descuidados, llevan incluso al abuso o crímenes de violencia de género, homicidio o feminicidio. Este tipo de conductas no deben ser toleradas por ningún motivo en una relación.
Humillar públicamente Intimidar o amenazar Controlar o prohibir Destruir artículos personales Manosear Caricias agresivas o indeseadas Golpear “jugando” Pellizcar o arañar
Si te ves en cualquiera de estas situaciones, intenta alejarte rápidamente del agresor. Puedes solicitar ayuda a gente de confianza o autoridades si temes la reacción de éste.
Estas conductas se encuentran en la escala más alta de violencia, pues violan los derechos humanos de las personas e incluyen crímenes graves.
Empujar o jalonear Cachetear Patear Encerrar o aislar Amenazar con objetos o armas Amenazar de muerte Forzar una relación sexual Abuso sexual Violar
Si te ves en cualquiera de estas situaciones, acude rápidamente con las autoridades competentes para levantar una denuncia de violencia en contra de esa persona.
Si eres víctima, o testigo, de algún tipo de violencia, puedes llamar a la Linea Mujeres (5658-1111) para recibir orientación sobre las instancias especializadas que te pueden brindar atención.
En las unidades de atención LUNAS, en las 16 Alcaldías de la Ciudad de México puedes recibir asesoría jurídica y/o atención psicológica.
Los Módulos de las Abogadas de las Mujeres en las Agencias del MP (Ministerio Público) Y Fiscalías Especializadas pueden brindarte orientación y apoyo en el inicio de tu denuncia.
En caso de que la conducta sea de violencia sexual, puedes realizar tu denuncia en la Fiscalías Especializadas de Delitos Sexuales más cercana a ti; o bien, recibir atención integral en el Centro de Terapia de Apoyo a Víctimas de Delitos Sexuales (CTA) de la Procuraduría General de Justicia.
Puedes encontrar más información aquí: Distintos tipos de violencia