“La ideología de género es una tontería, solo tomen una clase de biología”.
Muchas veces las personas tienen una idea equivocada de lo que significan cada uno de estos términos, lo que puede resultar en actitudes y comentarios que pueden resultar seriamente ofensivos para diversos grupos de personas. Comprender sus diferencias es importante para apreciar y respetar la diversidad que existe en nuestra sociedad.
Cuando las personas mencionan la biología, se refieren a este aspecto. El sexo se refiere a las características biológicas de un organismo, denotadas por sus órganos sexuales. Este es denotado por la existencia de los cromosomas X y Y. Sin embargo, existen casos en los que ambos órganos sexuales están presentes. Por esta razón, el sexo de una persona puede ser:
Intersex
Los órganos reproductivos externos pueden no corresponder con los internos
Hacer la distinción de este sexo es importante, no solo por cuestiones médicas, sino que también asegura que sean representados y su identidad completa sea respetada y no decidida por personas externas.
El género a diferencia del sexo, es un constructo social. Representa un conjunto de prácticas, comportamientos y expectativas que surgen de las diferencias anatómicas entre hombres y mujeres. En otras palabras, es un constructo social que engloba cómo nos expresamos y lo que se espera de nosotros. Sin embargo, al no ser inherentemente biológico, el género no tiene por qué corresponder necesariamente con el sexo biológico de cada persona.
Por esa razón, al ser producto de nuestra sociedad, la clasificación binaria del género no logra representar de forma adecuada la diversidad de grupos con los que la gente puede identificarse. Por esa razón, es mejor pensar en el género como un espectro continuo más que una división discreta.
La sociedad actual aún considera al género y sexo como una misma cosa, excluyendo a grupos que no se identifican con el género que “les corresponde”. Informarnos de las diferencias y la diversidad ayuda a crear una sociedad en la que todas las personas se sientan representadas, incluidas y respetadas.
La orientación sexual se refiere al sexo por el cuál una persona se siente sexual y biológicamente atraída. Comunmente este se asocia con el sexo propio de la persona, sin embargo existe igualmente un amplio espectro de diversidad.
Comunmente, los tres conceptos han sido usados como uno mismo: el sexo define el género y la orientación sexual. Sin embargo, existen más de dos sexos, y éstos no tienen por qué determinar lo que la sociedad espera de nosotros, ni por quién debemos sentirnos atraídos. Los grupos que no caen dentro de las categorías “esperadas” por la sociedad son víctimas de diversos tipos de discriminación, insultos y burlas. Muchas veces sin darnos cuenta, con el mismo lenguaje.